jueves, julio 31, 2008
Brides parte 2 Ya tengo tarea o más bien un libro más en la lista de libros por leer: Bride of Lammermoor. Y después de ver la lista de brides con cuidado me dí cuenta de que tienen algo en común (además de un vestido de novia): el obstáculo. O ellas tienen que superarlo (a veces, incluso, ser la novia es el obstáculo a superar), o ellas mismas lo son (sobre todo cuando son unas locas asesinas o la versión femenina del monstruo!)... ¿Y entonces?
Pues fácil. Lo que pasa es que ser bride es un estado muy efímero, y además, un estado de umbral si nos ponemos Campbellianos. Y además, marca (simbólicamente) una importante transición entre dos de los tres estados de la mujer: entre Maiden y Mother (por más que ahora exista un estado intermedio que se puede prolongar durante años, gracias al birth control y todas esas cosas). Entonces, la cosa es o ayudarla a cruzar el umbral o evitar que lo cruce, porque una vez cruzado las cosas son ya irreversibles (emm, podría decir algo feminista de esto, pero se los ahorro).
¿El obstáculo principal con el que yo me estoy topando? Va a sonar horrible y malagradecido, y no quiero ser sobre todo lo segundo, pero es que todos quieren ayudar y todos tienen opiniones. Lo cual está muy bien y ayuda, cuando viene oportunamente, pero se vuelve doloroso cuando uno ya tomó una decisión y alguien llega a cuestionarla o poner su sugerencia. Pongamos como ejemplo hipotético que después de discutirlo, buscar, hacer cuentas, etc., decidimos que mi entrada triunfal será sobre un rinoceronte. Pagamos el rinoceronte. Y dos días después llega alguien y empieza: "Me dijeron que quieres entrar sobre un rinoceronte. Mi mejor amigo tiene un criadero de hipopótamos, y yo te habría conseguido un superprecio. Ten el teléfono de mi amigo." See the problem? (tres, de hecho. 1. No es lo que quiero; 2. Es demasiado tarde y 3. Ahora tengo que hablarle al amigo por compromiso, pasar el día viendo a los hipopótamos y de todos modos decirle que no, que no me gustan mucho los hipopótamos).
Todo esto nos lleva a lo que quería decir, y es que justo por eso la mayoría de las brides de abajo están lidiando con bodas fallidas o con novios indeseados o bueno, la novia de Chucky no sé, supongo que también tenía que ver con querer estar con su satánico novio. ¿Por qué? Porque nadie quiere ver o leer, al menos no más de una vez, una historia de esos pequeños obstáculos bobos e increíblemente banales. Imagínense nomás si la crónica de ir con 700 banqueteros a probar sus cremas de espárragos con hongo furitake y almendras caramelizadas (lo acabo de inventar, eh? y además, me estoy burlando de los menús y estoy siendo irónica, no quiero que nadie llegue y me la pida a media boda), y luego comparar precios, fuera la trama principal. Duuuuuuull. No. El chiste es que cuando esta mujer-vestida-e-identificada-como-un-objeto-de-amor se pone al centro del escenario la historia obvia es problematizar esta imagen, y entonces tenemos a mujeres que están disfrazadas de objeto de amor pero no son amadas (vg. Miss Havisham, Corpse bride) o son amadas y/o aman a alguien que no es el novio (vg. Buttercup) o es un amor inusual (the future Mrs. Frankie) o de plano subvierten la imagen dulce y virginal del asunto (y quieren ir a matar a Bill).
Pero bueno, tendremos que ver qué onda con las bodas y las esposas. Próximamente.
Thoughts?
Pues fácil. Lo que pasa es que ser bride es un estado muy efímero, y además, un estado de umbral si nos ponemos Campbellianos. Y además, marca (simbólicamente) una importante transición entre dos de los tres estados de la mujer: entre Maiden y Mother (por más que ahora exista un estado intermedio que se puede prolongar durante años, gracias al birth control y todas esas cosas). Entonces, la cosa es o ayudarla a cruzar el umbral o evitar que lo cruce, porque una vez cruzado las cosas son ya irreversibles (emm, podría decir algo feminista de esto, pero se los ahorro).
¿El obstáculo principal con el que yo me estoy topando? Va a sonar horrible y malagradecido, y no quiero ser sobre todo lo segundo, pero es que todos quieren ayudar y todos tienen opiniones. Lo cual está muy bien y ayuda, cuando viene oportunamente, pero se vuelve doloroso cuando uno ya tomó una decisión y alguien llega a cuestionarla o poner su sugerencia. Pongamos como ejemplo hipotético que después de discutirlo, buscar, hacer cuentas, etc., decidimos que mi entrada triunfal será sobre un rinoceronte. Pagamos el rinoceronte. Y dos días después llega alguien y empieza: "Me dijeron que quieres entrar sobre un rinoceronte. Mi mejor amigo tiene un criadero de hipopótamos, y yo te habría conseguido un superprecio. Ten el teléfono de mi amigo." See the problem? (tres, de hecho. 1. No es lo que quiero; 2. Es demasiado tarde y 3. Ahora tengo que hablarle al amigo por compromiso, pasar el día viendo a los hipopótamos y de todos modos decirle que no, que no me gustan mucho los hipopótamos).
Todo esto nos lleva a lo que quería decir, y es que justo por eso la mayoría de las brides de abajo están lidiando con bodas fallidas o con novios indeseados o bueno, la novia de Chucky no sé, supongo que también tenía que ver con querer estar con su satánico novio. ¿Por qué? Porque nadie quiere ver o leer, al menos no más de una vez, una historia de esos pequeños obstáculos bobos e increíblemente banales. Imagínense nomás si la crónica de ir con 700 banqueteros a probar sus cremas de espárragos con hongo furitake y almendras caramelizadas (lo acabo de inventar, eh? y además, me estoy burlando de los menús y estoy siendo irónica, no quiero que nadie llegue y me la pida a media boda), y luego comparar precios, fuera la trama principal. Duuuuuuull. No. El chiste es que cuando esta mujer-vestida-e-identificada-como-un-objeto-de-amor se pone al centro del escenario la historia obvia es problematizar esta imagen, y entonces tenemos a mujeres que están disfrazadas de objeto de amor pero no son amadas (vg. Miss Havisham, Corpse bride) o son amadas y/o aman a alguien que no es el novio (vg. Buttercup) o es un amor inusual (the future Mrs. Frankie) o de plano subvierten la imagen dulce y virginal del asunto (y quieren ir a matar a Bill).
Pero bueno, tendremos que ver qué onda con las bodas y las esposas. Próximamente.
Thoughts?
Etiquetas: members of my club, on stories, ya extrañaba paint
Comments:
y entonces....
ya tienes el rinoceronte o quieres que te pase el telefono de un cuate que presta unos preciosos changos para bodas??
jajaja
ya tienes el rinoceronte o quieres que te pase el telefono de un cuate que presta unos preciosos changos para bodas??
jajaja
y entonces....
ya tienes el rinoceronte o quieres que te pase el telefono de un cuate que presta unos preciosos changos para bodas??
jajaja
ya tienes el rinoceronte o quieres que te pase el telefono de un cuate que presta unos preciosos changos para bodas??
jajaja
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